viernes, 22 de febrero de 2013

Resumen de la semana


¡Ya estoy por aquí de nuevo!

No he actualizado antes porque estaba esperando a ver cómo se desarrollaba la semana para informaros.

Por ahora, todo genial con los chavales. El martes y el miércoles estuve en un punto de información para jóvenes, Verkko, donde van aquellos que no están en el instituto y demás. El jueves en otro diferente, en Voisalmi, cerca de donde vivo, y hoy en mi centro de siempre, Monari.

Sobre todo ayer y hoy, la cosa ha ido perfecta. En el centro en el que estuve el jueves, suelen ir unas 20 personas y sólo dos de ellas chicas. Y, en fin, parece que a los chicos les ha motivado bastante que vaya para allá, porque hasta hubo uno que decía que había tenido un flechazo conmigo. Y hoy en mi centro joven, Monari, he pasado toda la tarde con un grupo de chicas muy majas enseñándoles inglés y español y ellas a mí finés, así que estoy contentísima. He notado que cada vez voy cogiendo más cosas y ya hay veces en las que incluso soy capaz de enterarme, a grandes rasgos, de lo que hablan en la conversación (depende del tema, obviamente).

Todo el mundo dice aquello de que los comienzos siempre son difíciles, pero no sé hasta qué punto es eso cierto. Desde luego, si este va a ser el periodo más duro que voy a pasar en Finlandia, no soy capaz de imaginarme cómo va a ser lo demás. Espero que, como poco, sea como está siendo esto.

La semana que viene voy a estar esquiando en Ruka, que es la ciudad más famosa para practicar ese deporte en Finlandia, así que no me conectaré; pero os pondré al día a la vuelta.

Por cierto, como lo prometido es deuda, aquí os dejo una foto del campamento al que fui, en Kokkola, en la que salgo sobre el mar.



Y aquí otra en la que salgo con mis dos compañeras de habitación.


¡Saludos!

domingo, 17 de febrero de 2013

De vuelta


Hei!

Ya estamos en casa (llegamos el viernes por la tarde) después de una semana en Kokkola. La verdad es que no he podido evitar dejarme una parte de mí allí, porque ha sido una experiencia inolvidable. Me encantaría volver. Sobre todo volver a ver a la gente, porque echo de menos a muchos; pero ya estamos planeando un viaje a la Laponia para poder volver a vernos e intentar ver las auroras boreales también.

Dentro de poco subiré alguna foto para que podáis ver qué es lo que estuvimos haciendo en el campamento.

Ayer, como no podía ser menos, salimos de fiesta para ver cómo es el ambiente por aquí y, sinceramente, yo no puedo tener queja, porque lo pasé genial. Además, he descubierto algo que me ha hecho mucha gracia: tengo mucho tirón entre los finlandeses, porque entre extranjera y morena, parece que les llamo bastante la atención. Y yo encantada, sinceramente. Además, fiché a unos cuantos... Eso sí, ya he conocido al futuro padre de mis hijos (de esos que no voy a tener): trabaja conmigo en el centro joven y, además, ayer estaba solo en el pub al que fui. Ya os iré contando...

Y ya esta semana vuelta a la vida normal, en mi lugar de trabajo.

Os seguiré informando.

¡Besos!

miércoles, 13 de febrero de 2013

¡Sin parar!

¡Por fin he podido conectarme después de cuatro días desaparecida!

La verdad es que no he parado ni un momento: entre vida social, actividades de formación y comidas, no me ha quedado tiempo.

El lunes estuvimos en la ciudad, Kokkola, haciendo unas actividades (juegos, digamos) para aprender algunas cosas básicas sobre cómo movernos por donde vivimos. El martes tuve por fin mis primeras clases de finés. Y hoy, miércoles, hemos estado en el Arctic Museum de Pietarsaari, que es una ciudad cercana a Kokkola.

La verdad es que aquí lo estoy pasando genial. Estoy muy a gusto y, sinceramente, me va a dar mucha pena tener que marcharme. Pero en mayo tenemos otro curso de formación como éste.

Ya he conseguido fotos, pero me tienen que etiquetar en ellas, así que dentro de poco veréis el campamento, que es un sitio precioso.

Hoy, dos de de mis compañeras y yo fuimos a dar una vuelta por la zona y volvimos a caminar por el mar helado, que ya os dije que me parece increíble. Y, además de eso, volvimos a tener sesión de sauna, así que os podéis hacer una idea de cómo lo estoy pasando.

Mañana es el último día aquí y creo que va a ser movido también, así que posiblemente no actualice; pero os volveré a contar en poco tiempo.

¡Saludos!

sábado, 9 de febrero de 2013

It's sauna time!

Hei!

¡Acabo de sentarme a descansar desde las 8 de la mañana! Llevamos todo el día sin parar haciendo actividades y juegos (dentro y fuera del edificio) para conocernos mejor y aprender sobre nuestra función aquí. Y, por supuesto, comiendo a todas horas. Porque otra cosa no, pero en Finlandia se come como Dios.

Hace un rato que hemos salido de la sauna y, como no podía ser menos, para contrastar, acabamos tirándonos en la nieve (creí que me iba a dar un infarto al hacerlo). Y, bueno, ahora a comer otra vez (aquí lo llaman "evening snack" y yo prefiero llamarlo "gula") y después un poco de fiesta. Eso sí, sin alcohol, que aquí está prohibido (y lo prefiero).

¡Besos!

P.D.: la entrada anterior es del día 8 de febrero, no del 9; pero no pude publicarla a tiempo. ¡Gracias por leer el blog!

Kokkola!

Moi!

Hoy llegamos a Kokkola, después de casi seis horas de viaje en tren.

El sitio es muy bonito, la verdad. Está al lado de la playa. De hecho, después de cenar y de hacer juegos para conocernos (como si estuviésemos en un campamento para niños), hemos ido allí.

Obviamente, el mar está congelado, pero la experiencia de poder caminar por encima de él en ese estado es algo que no tiene precio (aunque no a todo el mundo le ha gustado, qué se le va a hacer). Y, además, me ha parecido precioso el paisaje. Eso sí, hacía un frío increíble. Tanto, que hasta se me ha congelado el pelo que no iba tapado por el abrigo.

Sigo sin tener cámara, así que no creo que pueda subir fotos hechas por mí, pero intentaré que me etiqueten en alguna para que la veáis.

Esta semana me conectaré más bien poco, así que no podré actualizar con mucha frecuencia.

Espero que todos estéis bien.

Moi, moi!

jueves, 7 de febrero de 2013

Jornada de tarde

Moi! Mitä kuuluu?

¡Por fin he podido conectarme! Hoy llegué a casa de noche, porque el centro joven abría por la tarde, así que ya he podido conocer a los chavales con los que voy a estar.

Mañana nos vamos a unos cursos de formación los dos chicos que han venido a Finlandia conmigo y yo. Durante una semana vamos a estar en Kokkola, que es una ciudad con mar situada al oeste del país, en un campamento que tiene muy buena pinta. Y el calendario de actividades también, la verdad.

Y casi tengo acabada mi presentación sobre España. Veremos a ver qué les parece cuando me toque exponerla. Estoy por llevarles una tortilla de patatas como la que he hecho hoy para cenar, para que sepan lo que es la buena comida, jajaja. Y para hacerles un poco de chantaje también y que no sean muy antipáticos conmigo por soltarles el rollo.

En fin, ¡esto es todo por hoy! Os seguiré informando a lo largo de esta semana sobre lo que pase en el campamento :)

Moi, moi!

P.D.: para los que me han preguntado si los finlandeses están buenos: sí, lo están. La verdad es que hay pocos feos entre los jóvenes de por aquí. De hecho, hoy he conocido a un monitor (hasta ahora sólo he estado con chicas) y, en fin, es una pena que tengamos prohibido hacer nada con quienes trabajamos.

miércoles, 6 de febrero de 2013

Tercer día

Hyvää iltapäivää!

Hoy por fin me he vuelto a casa sola en autobús y ni lo he perdido ni me he pasado de parada que, teniendo en cuenta que aquí todo el paisaje es igual, no es cosa fácil, jajaja.

En el centro joven he estado preparando unos carteles para una presentación que tengo que hacerle a los chavales sobre España y, desde las 12 hasta las 16 que me he ido, he estado hablando con una de las chicas de allí del centro (practicando inglés) sobre cosas de nuestros respectivos países. Y, bueno, yo en mi línea de terapeuta: me ha contado su vida también, jajaja.

Después de las cosas que me ha contado sobre Finlandia, me he dado cuenta de que tiene mucho sentido la forma de ser que tienen, porque es un país sin identidad propia y digamos que aún les queda camino para suavizar su carácter en ciertos aspectos. Eso sí, yo no puedo quejarme para nada del trato que me dan, porque conmigo están siendo muy amables y simpáticos (sobre todo simpáticas).

Y, como es lógico, también he aprovechado para aprender algunas palabras más de finés. Esta vez, una de las mujeres que trabajan en Monari lo que ha hecho ha sido escribir en post-its palabras como "mesa", "silla" y "lámpara" en finés y me ha dicho que yo lo escriba en español, con la idea de que todos aprendamos algo nuevo gracias a estas etiquetas.

Por ahora, la convivencia no está dando problemas, pero mi compañero de piso debe ponerse las pilas un poco con ciertos detalles y, sobre todo, noto que debería cambiar su actitud respecto a la adaptación al país. Cuando lo conocí, me contó que él ya había estado en Finlandia el año pasado durante unos días y que volvió a España con el concepto de que los finlandeses son muy raros.

Y, bueno, yo no digo que no tengan sus rarezas, pero desde luego que es un pueblo con una historia muy curiosa detrás y eso hace que el carácter que se han forjado sus ciudadanos sea muy diferente al que tenemos, por ejemplo, los españoles. Pienso que alguien no puede llegar a un país con ese tipo de cosas en la cabeza, porque ya se cierra en banda. De hecho, hoy me contó que ha tenido un día peor de lo que esperaba y que se ha quedado bastante desanimado. Y, teniendo en cuenta las circunstancias en las que se vive en Finlandia, lo que menos debe hacer una persona ante tal acontecimiento es desanimarse, porque entonces no sé cuánto le podría costar levantar cabeza.

Por otro lado, también tengo en cuenta el hecho de que tiene 19 años solamente y que nunca ha vivido solo. Que, bueno, en cuanto a la casa debo reconocer que el chico no es una persona sucia (al menos en las zonas comunes), pero tampoco hace especial hincapié en tratar de ser menos desordenado con ciertas cosas. Pero bueno, aún estoy a tiempo de que mejore y madure, que es la idea de todo este proyecto. Para ambos. Y también la de favorecer la comunicación, especialmente de manera asertiva.

Por mi parte debo reconocer que soy un poco reacia a convivir con personas que no sean de mi familia, porque ya probé la experiencia y la verdad es que fue bastante desquiciante. No sé si es que tuve mucha mala suerte con la gente con la que convivía o es que de verdad la convivencia por norma general acaba convirtiéndose en un infierno. En mi caso dio la casualidad de que di con dos chicas que eran, no sólo un desastre, sino también bastante espesas con la limpieza de las zonas comunes y, además, nada dispuestas a poner de su parte. Así, la persona a la que le tocó hacerse cargo de las tareas fue a mí, al menos para que la casa estuviese en unas mínimas condiciones higiénicas. Y, cuando digo higiénicas, me refiero a que el baño llegó a estar sin limpiarse tres semanas y, finalmente, tuve que ser yo quien se hiciese cargo de él. Así que espero que esta vez no sea lo mismo, porque no voy a tener la misma paciencia.

Y esto es todo por hoy. No quiero que parezca que el mensaje de todo esto es negativo, porque de manera general es todo lo contrario. Simplemente, comparto mis impresiones y mi experiencia a todos los niveles.

¡Un saludo!

Comienza la semana

También quiero colgar la actualización de ayer, con algunos matices personales sobre mi experiencia aquí, que, por ciertos motivos, no puedo publicar en Facebook.

Estoy viviendo en una casa de madera típica del norte de Europa, en una zona de Lappeenranta que se llama Pontus. No vivo sola: tengo un compañero de piso. Es un chico de 19 años, Dani, que también está trabajando en un centro joven y, determinados días a la semana, en un colegio de la ciudad.

Voy a contar un poco sobre esta zona: Lappeenranta es una ciudad de 72000 habitantes aproximadamente y se encuentra a orillas del lago Saimaa, el más grande Finlandia. Tiene una universidad tecnólogica al parecer con cierto prestigio y, además, es una zona con bastante turismo, principalmente rusos.

Escribo, como ya dije en la entrada anterior, la misma publicación que he hecho en Facebook:

"Hei, Espanja!
Ya estamos en casa después de haber pasado la mañana aprendiéndonos las paradas de autobús que vamos a usar. Hemos estado en Monari, que es el centro joven donde voy a trabajar, y nos han tratado genial. Y nos han puesto de todo en el desayuno :) También nos han regalado un diccionario español-finés para que podamos empezar a manejarnos con el idioma.

Me llama mucho la atención que aquí la gente trabaja descalza. Como si estuvieran en su casa, vamos.

Luego, la chica que se encargaba hoy de nosotros nos ha traído a casa y nos hemos ido a dar un paseo para localizar las paradas de autobús de la zona. A la vuelta, hemos parado en la puerta de un pub que tenemos enfrente de casa para ver el horario de apertura y ha salido un señor finlandés bastante borracho que nos ha invitado a un té a cada uno, porque, al parecer, le hemos caído en gracia.

Y, bueno, ya hemos estrenado los dos el suelo del país con algunas caídas y resbalones: el mío ha sido por la mañana estilo breakdance y los de Dani un poco más peligrosos, porque casi se queda atascado en la nieve por intentar buscar un atajo para llegar a casa y evitar al señor del pub.

En fin, que empezamos ya con situaciones surrealistas.

Os seguiremos poniendo al día.

Moi, moi!"

Llegada

Hola de nuevo. Siento la tardanza, pero llevo unos meses en los que he estado muy liada.

Ahora mismo escribo esto desde Finlandia, el país que llevo 8 años queriendo visitar.

Estoy en una ciudad al sureste del país: Lappeenranta, en la región de South Karelia. Voy a estar trabajando de coordinadora de actividades en un centro joven de la ciudad y, también, en un punto de información para jóvenes. Por ahora, mi estancia aquí va a ser de 11 meses y luego tendré que volver a España.

Os iré actualizando de la misma manera que lo hago en Facebook: más o menos, una vez cada día, aunque puede que a veces sea con menor frecuencia por determinadas circunstancias.

Aquí os dejo lo que puse el primer día en mi nueva casa:

"Moi, Suomi!

Hoy hemos amanecido en Lappeenranta con -6ºC y una sensación térmica de -12ºC (y bajando). Es mi primer día de trabajo. A ver qué tal se me da moverme sola en autobús por aquí :)"